Todos los centros
de investigación del país están pasando por una grave crisis de diversas índoles, la Fundación Instituto Botánico de Venezuela "Dr. Tobías Lasser",
donde se resguarda el Herbario Nacional de Venezuela (la mayor colección de
muestras botánicas del país), La Biblioteca Henri Pittier (una de las mas
importantes colecciones bibliográficas botánicas de Venezuela), el Jardín
Botánico de la UCV (donde se presentan numerosas especies del país y de otras
partes del mundo, con la mayor colección de Palmas vivas de Suramérica), no
escapa a esta realidad.
Un poco de
historia…la cual es importante para entender los saltos legales y
políticos que a lo largo del tiempo ha tenido que
dar la FIBV. Poco después de la creación del Jardín Botánico en 1945, comienza
a funcionar el Instituto Botánico, ente que en aquel entonces dependía
completamente de la Universidad Central de Venezuela. En 1969 la Universidad es
allanada y los terrenos del Jardín Botánico, donde se escondían los
estudiantes, se decretó bajo la figura protectora de Parque Nacional lo que
permitió establecer un comando de la Guardia Nacional y el Instituto es adscrito entonces
al Ministerio de Agricultura y Cría. El Instituto Botánico de Venezuela pasa a
ser Fundación Instituto Botánico de Venezuela en el año de 1991 cambiando también el
nombre a “Jardín Botánico de Caracas”, pasando a ser una dependencia del
Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales Renovables. El nombre completo
de Fundación Instituto Botánico de Venezuela “Dr. Tobías Lasser” es decretado
en 1996 en honor a su fundador. En el año 2000, es regresado el Jardín Botánico a la
Universidad Central de Venezuela por decreto presidencial y se adscribe la FIBV a la UCV. En ese mismo año la UNESCO declara a la Ciudad
Universitaria de Caracas “Patrimonio Cultural de la Humanidad” incluyendo al
Jardín Botánico de Caracas (Fuente http://www.natura-digital.com/backup/index.php/javascript/historia-natural/96-conservacion-ex-situ/85-el-jardin-botanico-de-caracas).
Actualmente, inmersos
en la crisis general tanto del país como de la Universidad Central de Venezuela, la FIBV atraviesa por varios problemas importantes tanto
económicos como laborales. Son problemas complejos y con una resolución que
depende de entes externos que no parecen tener la voluntad de solucionar las
cosas. Además estamos abatidos por la crisis política y presupuestaria universitaria.
Esto generó que para el fecha lleve más de 10 días con las puertas cerradas al
ingreso de personas a su recinto, pero abiertos a que todos tengan el interés
de preguntar que nos está pasando. Eso ha provocado que tanto internos como
externos se movilicen, con sus medios, con sus ideas y con sus estrategias para
tratar de dar a conocer la problemática por la que estamos atravesando. Son muchas las instancias a las que se han acudido, no es algo que comenzó reciente, son problemas que llevan varios años tratando de encontrar soluciones.
Lo importante es que
muchos de los integrantes de la familia FIBV, están avocados a ver como se pueden resolver las
cosas de la mejor manera y mueven múltiples engranajes para lograr encender una luz al final del túnel.
Irene Carolina Fedón Ch. y Jesús E. Hernández M., en Caracas, a los 10 días del mes de Junio, 2012.
Irene Carolina Fedón Ch. y Jesús E. Hernández M., en Caracas, a los 10 días del mes de Junio, 2012.
A ti, lector de
estas palabras, gracias por tu interés. Para mayor información visita los
siguientes enlaces que son una recopilación de los distintos puntos de vista:
http://www.el-nacional.com/noticia/36983/20/Por-falta-de-recursos-languidece-el-Jardin-Botanico.html
Trabajé en la Fundación hace veinte años y es bien cierto que ya en esa época se planteaban los mismos problemas que se han delineado arriba...lamentablemente, su solución depende de entes externos que o bien no se interesan o sus prioridades estan bien alejadas de la investigacion botánica. No obstante, la FIBV ha demostrado ser una organizacion con bastante "resiliencia", gracias a sus integrantes...estoy seguro que esta vez no sera diferente.
ResponderEliminarLos trabajadores del Jardín Botánico, somos los que hemos dado la pelea, en esta lucha por ingresar a la nómina dee la UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA. Nosottros no negociamos ni aceptamos chantajes con los CESTA TICKETS. Eso no es una dádiva sino un DERECHO.
ResponderEliminarImperdonable, las personas que toman acciones en contra de su propia casa no tienen derecho de continuar allí si tanto les molesta busquen otro lugar para dañar y destruir..., las acciones deben ser otras.
ResponderEliminarSaludos